En un entorno laboral en constante movimiento y evolución, donde las nuevas tendencias a cargo de las generaciones más jóvenes surgen en respuesta a los desafíos y cambios, ha surgido la temida “renuncia por venganza” y ha comenzado a captar la atención de los expertos. Esta práctica, que implica una salida ruidosa y cargada de resentimiento, podría tener un impacto significativo en las empresas a nivel nacional e internacional este 2025. Pero, ¿qué impulsa este fenómeno y qué pueden hacer las empresas para prevenirlo?

“La renuncia por venganza o revenge quitting es una tendencia laboral creciente en la que los empleados deciden dejar sus trabajos de manera abrupta y deliberada como represalia por un ambiente laboral negativo, lo que puede incluir comportamientos destructivos como eliminar datos importantes de la empresa o filtrar información confidencial antes de marcharse”, explica Hugo Álvarez Yapur, especialista en recursos humanos, empleabilidad y CEO de Rise Job Hunting.

En el mismo sentido, el experto agrega que “las causas principales son el maltrato laboral, situaciones de acoso, discriminación o abuso de poder pueden generar resentimiento en los empleados; la falta de reconocimiento, sentir que el trabajo y los logros no son valorados puede llevar a un empleado a buscar revancha; las injusticias, decisiones arbitrarias, falta de transparencia o favoritismos pueden alimentar el deseo de venganza; y condiciones laborales precarias, como salarios bajos, falta de beneficios o un ambiente de trabajo tóxico pueden generar frustración y resentimiento”.

Respecto a las consecuencias para las empresas y organizaciones que puede acarrear esta modalidad, Hugo Álvarez detalla que “la pérdida de talento puede ser una de las principales, donde la salida inesperada de empleados capacitados puede afectar la productividad y el rendimiento; afectar la reputación corporativa, donde una alta rotación laboral puede perjudicar la imagen de la empresa y dificultar la atracción de nuevo talento; y algunos costos adicionales, ya que la necesidad de reclutar y capacitar nuevos empleados incrementa los gastos operativos y administrativos”.

Finalmente, y en cuanto a recomendaciones para prevenir la “renuncia por venganza”, el CEO de Rise Job Hunting destaca que “principalmente se debe escuchar activamente a los colaboradores, sus quejas y reclamaciones, y actuar en consecuencia; aplicar una comunicación fluida y transparente, comunicarse con el equipo de forma frecuente y transparente para evitar ambientes de trabajo tóxicos; gestionar las expectativas, ser claros en las condiciones de trabajo y aportar seguridad y estabilidad; y contar con una estrategia basada en el bienestar laboral, priorizar el bienestar de los empleados y crear una cultura corporativa positiva”.