Los tacos no solo generan estrés, sino que también aumentan el riesgo de accidentes. En algunos casos, un choque o una falla mecánica puede terminar en lo impensado: el auto en llamas.

Moverse por la ciudad en horas punta es, para muchos conductores, una experiencia agotadora. Congestión, bocinas, frenazos constantes y el estrés de llegar tarde forman parte del día a día. Pero lo que muchos no consideran es que, en este ambiente de caos urbano, también aumentan las probabilidades de sufrir un accidente… y en casos extremos, que el auto se incendie.

Aunque suene dramático, los incendios vehiculares no son tan infrecuentes como se piensa. De hecho, existen factores que pueden facilitar que un automóvil comience a arder tras una colisión o incluso en medio de su funcionamiento habitual.

¿Por qué se incendia un auto?

Los vehículos pueden incendiarse por múltiples causas, pero las más comunes tienen relación con fallas mecánicas o eléctricas. El sobrecalentamiento del motor, cortocircuitos, fugas de combustible o incluso un mal estado del sistema de escape, pueden generar las condiciones perfectas para un incendio.

Uno de los principales indicadores de riesgo es el olor a bencina. Si percibes este tipo de olor dentro o fuera del vehículo, o cualquier otro aroma inusual, lo más recomendable es acudir de inmediato a un mecánico especializado. Ignorar estas señales puede tener consecuencias graves.

Además, es importante tener en cuenta que un vehículo en mal estado, sin mantenimiento preventivo, siempre será más propenso a este tipo de emergencias.

¿Qué hacer si tu auto comienza a incendiarse?

Actuar rápidamente y de forma segura puede marcar la diferencia entre un susto y una tragedia. Si tu automóvil comienza a arder, sigue estos pasos:

  1. Detén el vehículo lo antes posible, siempre asegurándote de que sea seguro hacerlo. Señaliza tu maniobra y dirígete a una zona segura fuera del tráfico, como un costado de la vía o una zona de descanso.

  2. Apaga el motor de inmediato. Esto puede ayudar a frenar la propagación del fuego.

  3. Evacúa el vehículo sin demora. Asegúrate de que todos los ocupantes salgan y no regreses por ningún motivo.

  4. Aléjate al menos 30 metros del automóvil y ubícate en un lugar seguro, alejado del tráfico y de posibles explosiones.

  5. Llama a los bomberos de inmediato y proporciona la ubicación exacta.

La prevención sigue siendo la mejor herramienta: mantener tu auto en buen estado, revisar periódicamente el sistema eléctrico, y estar atento a cualquier signo anormal puede ayudarte a evitar situaciones de riesgo.